Una de las mayores preocupaciones de los padres es que sus hijos no sean capaces de defenderse cuando sea necesario. Además de enseñar a los niños a evitar los problemas, las artes marciales los prepararán física y mentalmente para defenderse en caso que sea necesario.
Fallidamente se cree que las artes marciales sólo son para adultos, pero esto no es así ya que las artes marciales pueden beneficiar a los niños tanto o quizás más que a los adultos.
Y esos beneficios van más allá de simplemente mantenerse en forma y saludable; las artes marciales te proveen de cualidades y lecciones de vida que son innegablemente valiosas para un niño en crecimiento.
Los beneficios que producen las artes marciales, en especial el muay thai, Son innumerables, pero ganan especial atención los beneficios de tipo mental y social, porque influyen en el desarrollo de nuestras fortalezas internas.
Beneficios físicos: a través del ejercicio se le brinda fuerza, flexibilidad, elasticidad y resistencia a los músculos, huesos y articulaciones. Logrando una mejora considerable en la respiración, fortaleciendo el funcionamiento del corazón y el sistema inmunológico. La práctica de las artes marciales contribuye a adquirir agilidad, flexibilidad y mejor agudeza visual.
Beneficios mentales: en la vida nos vamos a encontrar en situaciones altamente estresantes. Las artes marciales nos preparan para manejar nuestros pensamientos y movimientos de la manera más adecuada a la situación que se nos llegase a presentar por difícil que esta sea, por ejemplo: ante una agresión o pelea, una entrevista de trabajo, o en cualquier momento donde haga falta concentración y un buen enfoque de la situación.
Beneficios Sociales: En una escuela de artes marciales se aprende disciplina, respeto por los demás, eficiencia y eficacia, trabajo en grupo y liderazgo. Todos estos valores se integran en el cuerpo y en la mente de los practicantes, y esto se traslada casi instintivamente a la vida real, haciéndolos más seguros de sí mismos, conscientes de las debilidades y fortalezas propias y de los demás.
La finalidad de nuestra escuela es hacer de sus integrantes mejores ciudadanos, porque al mejorar el individuo, mejora la sociedad.
No somos una escuela, somos una familia…
¡Unete a nuestra gran familia!
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